miércoles, 11 de agosto de 2010

UNIVERSIDAD
DE LA VIDA

En una verdadera democracia, no me refiero por supuesto a la peruana, la elección de la congresista Hilaria Supa Huamán, campesina quechuahablante de Huayllacocha, Anta, como Presidenta de la Comisión de Educación y Cultura del Congreso de la República, no originaría controversia alguna. En consecuencia, la doctora Martha Hildebrandt no hubiera tenido necesidad de presentar un certificado médico para justificar su ausencia en el acto de la elección de la Supa y de la instalación de la Comisión, ni la Mayor de la reserva del Ejército peruano, Mercedes Cabanillas - ¿la vieron uniformada en el desfile de Fiestas Patrias mostrando muy oronda sus galones y condecoraciones?- tendría que haber renunciado a la Vicepresidencia de esa Comisión para no tragarse el sapo de ser la subalterna de una persona que según la propia Cabanillas "no tiene la especialidad".
Lo cierto es que con actitudes como las descritas, ambas parlamentarias, una fujimorista y la otra aprista, revelan ante los ojos del mundo de un lado intolerancia, que no es nueva dicho sea de paso, ante una persona que como la congresista Supa no proviene pues de las canteras del Perú formal, occidental y cristiano donde los grados y los títulos dan caché, así sean mafiosos, ladrones o asesinos; pero de otro lado, sin subestimar el racismo latente, manifiestan la incompetencia de determinados congresistas para entender la diversidad racial, cultural, lingüistica y religiosa del Perú realmente existente, cuyos representantes, en organismos como el Congreso, deben tener los mismos derechos, así sean quechuas, aymaras, boras, huambisas o jíbaros.
Los hombres y mujeres de ese Perú de todas las sangres no habrán pasado por Universidad alguna, pero tienen una experiencia de vida, un saber, sin cuyo reconocimiento no podríamos entender la vigencia de mundos milenarios como el andino o el amazónico a pesar de la agresión material y espiritual de todos los Pizarros y Orellanas que hasta el presente, como sucede con la Sierra y Selva, siguen moviéndose como Pedro en su casa. Universidad de vida que desde otra visualización del futuro podría palanquear un desarrollo real del país, construido por quienes ahora son simplemente un dato, pero que anhelan convertirse en protagonistas de ese cambio.
Es indudable que la presencia de la congresista Supa al frente de la Comisión de Educación no va a resolver los problemas de fondo de la educación peruana, ni el divorcio de los neoliberales criollos con el desarrollo de la ciencia y la tecnología en el Perú. Si a lo largo de la década que está feneciendo no se han logrado avances verdaderos en esos terrenos, menos será en el poco tiempo que queda del presente régimen.
Lo importante está en que el posicionamiento de la citada parlamentaria en la Comisión de Educación - si es que su partido está pensando seriamente en el asunto- puede servir para por lo menos ver con otros ojos temas que desde una óptica limeña, costeña o urbana, no merecen mayor atención. Un ejemplo: la importancia de la educación no formal en el desarrollo del país, examinada desde quienes son hechuras de la misma. No hay necesidad de contraponerla a la educación formal, aunque esta merezca una evaluación integral, lo que se requiere es destacar la trascendencia de ideas y sabidurías tradicionales en la formación de los nuevos ciudadanos que el país necesita.

1 comentario:

  1. Este comentario exagera (si ello es posible) en engolosinarse con lo politicamente correcto.

    La Senora Supa no debe ser ni aceptada automaticamente por su origen ni rechazada por lo mismo. No debe verse el caso en el contexto que se la querido dar, sino en la evaluacion de sus cualidades personales. La Senora Supa tiene quizas mucho de lo que llaman sabiduria popular, pero no tiene las minimas cualidades personales por ejemplo para dirigir una sesion. Lo ha demostrado muchas veces y lo ha vuelto a demostrar "dirigiendo" la sesion de apertura de la comision de educacion. NI siquiera puede hacerlo en quechua, idioma que ella no escribe y que habla en un dialecto poco comprensible para la inmensa mayoria de quechuahablantes.

    No se trata de intolerancia. Para ejercer determinados cargos se requiere un perfil adecuado. No por el hecho que haya tanto delincuente con "titulos" academicos, vamos a denostar contra el esfuerzo de muchisimos profesionales de gran nivel en nuestro pais, y mas bien ensalzar la ignorancia, sea cual fuera el origen, motivacion o circunstancias que lo expliquen. Nuestra solidaridad con gente como Supa, que lucha dia a dia por hacerse un lugar en la sociedad. Pero hacer lo que se ha hecho en el Congreso no es el camino. Se le expone innecesariamente al escarnio y la burla.

    También es racismo y del peor no exigir a ciertos perfiles "étnicos" (véase las comillas) requisitos que a otras "etnias" se les solicita como elementos ineludibles.

    Y eso vale en todas las direcciones. O nos va a decir el Dr Bruce que su origen "extranjero" (véase las comillas) no le ha dado una ayudita? Por ejemplo, aceptaria el Dr Bruce como rector en la U Catolica a alguien como la Senora Hilario Supa? Que no porque alli hay requisitos académicos? Pero si hay tanto académmico delincuente, para qué !!! Después de este articulo me gustaria que el Dr Bruce lance una propuesta especifica para cambiar la ley esa tan "antojadiza e intolerante" que exige requisitos académicos para los rectores de las universidades. Y si de repente vamos muy rapido, que proponga a alguien con el CV de la Senora Supa como profesora en la universidad.

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