La marca de Montesinos
Lo dijo hace algunos días el profesor Cotler:
los promotores del Sí usan métodos montesinistas, es decir raciocinios y
prácticas túrbidas, propias de mafias. El distinguido académico resumía
así lo que todos los limeños estábamos viendo y escuchando de parte de
quienes quieren derrocar la administración de la señora Villarán: compra
de conciencias y votos, acusaciones sin fundamento, trampas y argucias
mil...estilos y hábitos que caracterizaron los mejores años de la
dictadura fujimontesinista de los 90.
Nadie imaginaba en esos momentos
que en el curso de esa campaña vil íbamos a poder constatar,
fehacientemente, lo que se sospechaba: que los marcos turbios que daban
la cara por el Sí, no eran sino las marionetas de personajes que
amparados en las sombras - mismo Montesinos- conspiraban contra el voto
democrático de la ciudadanía para satisfacer vaya uno a saber que
aspiraciones particulares y siniestras.
En ese sentido, el ex alcalde de Lima no tiene
escapatoria, un audio ha demostrado que él es uno de los grandes
timoneles de quienes están contra Lima y sus ciudadanos, porque prefiere
su destrucción por el caos, el desorden y el pillaje, abierto o
encubierto, a la construcción de una ciudad moderna, democrática y
progresista.
El mudo, bien lo sabemos, fue una víctima del
fujimontesinismo en los años de la dictadura; hoy está demostrando que
además fue un buen alumno. Razón tiene la señora Wiener al decirnos en
su último escrito que votar por el No, aunque parezca contradictorio,
es votar afirmativamente, por una Lima que mire hacia el futuro y que
rompa definitivamente con ese pasado sucio y fangoso expresado en estos
momentos por el Sí y sus promotores, den o no la cara.
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